Virgin Group, entidad que actualmente engloba más de 400 compañías, nació en el año 1970 como un proyecto pequeño el cual no tenía grandes aspiraciones, sino la de poder sobrevivir en un país industrializado. Richard Branson, dueño del actual emporio pasó de ser un simple comerciante con una idea interesante, a convertirse en un magnate en el mundo del negocio.
Tal y como reseñó el portal web Intereconomía: así como un grano de mostaza puede echar largas raíces, así sucedió con una idea prácticamente pequeña, la cual siempre tuvo como meta transformarse en un proyecto de gran envergadura.
Brandon pasó de tener un capital modesto, como el de cualquier comerciante que se inicia en el mundo de los negocios, a reunir una fortuna que se estima en unos 5.100 millones de dólares. Además de ser comerciante y estar al frente de Virgin Group, tuvo tiempo para escribir su libro ‘Like a Virgin: Secrets They Won’t Teach You at Business School’, el cual fue publicado en el año 2012 y en el que explicó cuáles fueron los principales ‘tips’ que aplicó para multiplicar su fortuna.
1.- Si no te gusta no lo hagas: podrá sonar a frase cliché porque nadie quiere trabajar en lo que no le gusta, sin embargo, la idea de comenzar un proyecto es casarse “literalmente” con la propuesta y conocerla hasta odiar cualquier detalle y nunca abandonarlo así haya dificultades.
2.- Ser original y hacer algo distinto: conocer a la competencia puede jugar a favor de quien decida emprender pues servirá para crear algo innovador. Algo como ocurrió con Steve Jobs, quien después de ver que todos los teléfonos celulares tenían teclas, a él se le ocurrió crear el iPhone.
3.- Estar orgulloso del trabajo: resulta venenoso escuchar a las demás personas despotricar sobre su trabajo, por lo tanto, uno mismo nunca puede hacer lo mismo, hay que siempre ser positivo.
4.- Escuchar consejos: Aunque conoces como nadie tu proyecto, nunca está demás el comentario de alguien conocedor de la materia. La idea está en aplicar un buen consejo.